miércoles, 10 de noviembre de 2010

SETENTA AÑOS LLAMÁNDOSE SUCRE

Por Olindo Aliaga

Este año se conmemora el 70 aniversario del cambio de nombre de Sucre antes Huauco ordenado por Decreto Legislativo 9198 firmado por el presidente Manuel Prado en la sede palaciega el 15 de noviembre de 1940.

El autor de ese inusitado cambio fue el tribuno Clodomiro Chávez Mariñas, jurista y Diputado por la provincia de Celendín durante el primer gobierno plutocrático de Prado.

Las razones que impulsaron al Diputado, autoproclamado abogado del Perú y de la Argentina fueron fatuas motivaciones de nacionalismo y el culto a la personalidad.

Empujado por los afanes de modernidad, el Dr. Chávez, sin ampliar, ni profundizar sus investigaciones sobre el origen del antiguo nombre de su tierra optó por el facilismo del borrón y cuenta nueva, borrando de un plumazo y sin la aquiescencia del todo el pueblo mutó el nombre de origen de esa tierra nuestra. Si el nombre de Huauco no dijo nada al vozarrón parlamentario, para nosotros ese cambio solo sirvió para hacernos olvidar de la portentosa e histórica memoria del querido “mil veces querido Huauco” como alguna vez lo dijo el presbítero Samuel O haya.

El Mariscal Antonio José de Sucre (1796 – 1730) fue un militar vencedor de la batalla de Ayacucho, su bizarría y hazaña guerrera lo conoció el centro y el sur del Perú, el parlamentario representante de Celendín no tuvo en cuenta que el mariscal Sucre fue esicionista, ambicioso de poder que dividió al Perú creando la República de Bolivia en medio de ardidas protestas y el desacuerdo de los pobladores del Alto Perú como entonces se le llamó al Perú Altiplánico.

El general Gamarra (peruano) refiriéndose al Mariscal venezolano dijo: “Que quería al mismo tiempo ser el general de Colombia, súbdito de Bolívar y presidente de Bolivia”.

A Sucre le tuvieron ojeriza sus camaradas y fue muy mal visto por los bolivianos, harto conocido son los versos ponzoñosos del Clérigo Larriva que decían: Sucre en el 28 / irse a su tierra promete ¡cómo permitiera Dios! / ¡Qué fuese el 27!

El cambio de nombre del pueblo bautizado con el del Mariscal Sucre no obstante que al pueblo no se le informó convenientemente se realizó sin ninguna resistencia, salvo alguno que otro comentario tibio y entre bastidores de algunos pobladores.

Este comentario que nos mueve hacerlo el 70 aniversario del nombre de Sucre no tiene la intención de agravar la memoria del héroe de la causa de la independencia americana, ni mellar la gran figura del hijo de Sucre José Clodomiro Chávez Mariñas a quien consideramos un hombre de amanecer.

La coyuntura del 70 aniversario de este hecho trascendental de Sucre es una ocasión para que los estudiosos e intelectuales de Sucre enfilen su plasma hacia ese acontecimiento y escriban sobre la importancia o no del cambio de nombre del pueblo.

En ECO SUCRENSE; cuyas páginas están transidas de fe por Sucre se ha dedicado a difundir su historia, siendo el pueblo el que preside su destino, abre la polémica al sostener que el Dr. Chávez Valderrama no estuvo muy acertado al solicitar al parlamento el cambio de Huauco por el de mariscal Sucre, pensando únicamente en una supuesta modernidad y progreso que nunca llegaron al pueblo.

El objetivo de este debate es con el fin de aclarar los vericuetos ocultos de Sucre y a fin de no perder su memoria; porque un pueblo sin memoria no tiene espacio en el tiempo. Los sucrenses debemos celebrar juntos este 70 aniversario de nuestro suelo llamado Sucre. Los sucrenses que vivimos más allá de sus fronteras le rendimos homenaje a Sucre y a su emblemático nombre Huauco diciendo como el poeta Vientos del pueblo me traen / vientos del pueblo me arrastran / esparcen y arrancan el corazón.

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